Corrían días de agosto cuando todo Chile fue testigo del derrumbe de una mina, hasta ese momento desconocida para todos, la mina San José. Digo esto, porque muchos conocemos el nombre de algunas minas como Chuquicamata, La Escondida, El Teniente, y otras más que son pertenecientes a la gran minería chilena. Sin embargo, casi nadie o muy poca gente conoce cómo se llaman y cómo se operan las minas de la pequeña y mediana minería.
En esos meses del año todo Chile estuvo pendiente de lo que pasaba con "Los Mineros". Vimos por televisión todo el rescate desde el día uno que cuando se dio la noticia del derrumbe, pasando por el hallazgo de "Los 33" con vida, hasta el día en que todos ellos salieron vivos desde la entrañas de la tierra.
Fueron cerca de setenta días de emociones de todo tipo, sentimos impotencia ante la naturaleza, vergüenza por la manera en que ellos trabajaban, rabia por el comportamiento de los dueños de la mina, dolor por el sufrimiento de las familias, esperanza por encontrarlos con vida, humanidad por la voz y suspiros de un ministro, y tantas otras sensaciones que mantuvieron a todo un país exigiendo respuestas y pidiendo responsables.
Muchas autoridades se encargaban de repetir tantas y tantas veces como les fuera posible, que lo que había pasado ahí no quedaría en la impunidad, que se iban a perseguir todas las responsabilidades, tanto civiles como criminales, y hasta se dijo que una vez rescatados los mineros, nadie volvería a operar ese yacimiento, ya que no se contaba con los estándares mínimos de seguridad. Las autoridades del rescate dijeron que no tenían mapas fidedignos de la mina, que no había escalas de escape, que hubo advertencias de parte de los trabajadores sobre lo que podía pasar, y que todo eso fue ignorado por los dueños de la empresa, cosa que a nadie le extraño, ya que muchas veces se hace vista gorda a la forma en que los trabajadores chilenos deben desempeñar sus labores. Todos querían ver rodar las cabezas de los dueños de la mina, que en rigor son los responsables legales, todos querían que quien correspondiera se hiciera cargo lo que sucedió.
Vimos en la mina San José al presidente de la república, a su señora, a su hermano, a su cuñada, varios ministros, senadores y diputados de oposición y de gobierno, músicos, payasos, vendedores, ladrones, niños, y en rigor, ahí había una pequeña muestra de lo que somos los chilenos, un pequeño de Chile estaba situado a los pies del cerro.
Todo lo escrito con anterioridad se contrapone a lo sucedido con los chilenos que murieron en la cárcel de San Miguel. Los que han pedido la cabeza del director de gendarmería son acusados de buscar un beneficio político, y quienes han buscado responsabilidades en la administración anterior, son acusados de lo mismo.
No he visto la misma vehemencia en el discurso de la autoridad ni de la oposición en busca de responsabilidades, ya sea civiles o criminales como en el caso de "Los 33". Tampoco he visto a la autoridad diciendo que esa cárcel se va a cerrar ya que no cumple con los estándares mínimos de seguridad, cosa que quedó demostrada. No he visto la asignación inmediata de recursos como fue con el rescate de "Los Mineros" para mejorar la seguridad de los internos. Y no me digan que lo hacen y que los medios no lo han divulgado, ya que después de haber sido nuestro presidente elegido como el mejor comunicador del mundo por una consultora norteamericana, por el rescate de Atacáma, no se le puede haber olvidado en tan poco tiempo tremenda virtud.
Ahora viene lo que a mi me parece más grave aun, ahora hablo de nosotros, los comunes y mortales. No nos conmovimos con lo sucedido, no nos movilizamos por esto cómo lo hicimos con los mineros atrapados, no nos hemos sentido tocados por esta tragedia.
Acaso la vida de un preso no se compara con la de un minero, o con la de un campesino, o con la de un médico, o con la de un empleado público o privado. Acaso la vida de un preso no se compara con la mía o con la tuya?
Cuántos chilenos lloramos al ver el rescate con vida de "Los 33"?
Cuántos chilenos lloramos al ver como morían "Los 81"?
Totalmente de acuerdo con todo lo que dices, pero ya desde antes creo que sabemos que todo va a quedar en nada, somos muy buenos para elevar algi cuando es noticia, cuando termina nadie se acuerda más. Con la cárcel y los presos es otro fenómeno,dependiendo el caso vemos en las noticias gente gritando " que los sequen en la cárcel !!! "...pero no la construyan cerca de mi casa, eso no !!!...Somos un hermoso país pero muy falto de cultura y para nada solidarios, por mucho que se diga lo contrario, la verdad es que en el día a día no lo somos, los políticos de ambos lados saben perfectamente que tenemos muy mala memoria y que un hecho hace olvidar el anteior, esto ha sido y siempre será así...lamentablemente y no es que tenga una visión microscópica y negativa de la vida ylas circumstancias..basta ver que a la vez que criticamos a los parlamentarios los reelegimos....es un círculo vicioso.
ResponderEliminarEstoy completamente de acuerdo respecto del valor de la vida de una persona sea cual sea su condición social, política, religiosa, etc. Sin embargo creo que comparar las instancias y condiciones de los mineros con la tragedia de los reos es un gran error, ya que los mineros no eligieron libremente estar ahi, ellos fueron víctimas de un abuso mayor de pate de sus empleadores, donde dado su situación económica privilegiaron el beneficio económico por sobre el riesgo que involucraba trabajar en esa mina. Claramente si los mineros hubieran tenido la oportunidad de ganar el mismo sueldo pero en condiciones seguras nadie hubiera elegido estar en San Jose.
ResponderEliminarAhora podemos discutir mucho si los reos tuvieron o no posibilidades de formación o condiciones de desarrollo en su vida, desde mi punto de vista no la tuvieron, pero creo que eso no viene al caso en esta oportunidad, los reos eligieron un camino el delictual y claramente no fue el del esfuerzo, tal como lo hicieron los mineros (que creo que tampoco tuvieron las mejores condiciones de desarrollo en su vida, pero no eligieron delinquir.
Creo que no hay vidas mas valiosas que otras, sin embargo si hay ciudadanos mas valiosos que otros y en tu blog comparas a ciudadanos honestos y esforzados con delincuentes que le hicieron mal a la sociedad.
Claramente a todos nos gustaría que los reos tengan condiciones humanas para cumplir su condena, pero el país tiene prioridades y deberes con la gente honesta en primer lugar. Y, por último la situación carcelaria es una deuda de la sociedad chilena completa y no de un gobierno en particular ya que esta situación siempre ha sido igual, es decir las mejoras al sistema carcelario se hacen cuando el límite es estirado hasta el máximo.