La semana pasada el diputado Rene Alinco se unió al Partido Progresista en medio la controversia generada por ciertas conductas de él, las cuales todos conocemos. Cómo no recordar el sabroso tema de la camioneta con los vidrios empañados, además de la celebración del triunfo de Chile sobre Uruguay en la supuesta despedida del Maestro Bielsa, donde según el honorable, todo Chile dijo salud esa noche. En ambas ocasiones él terminó charlando con Carabineros.
He escuchado muchas críticas hacia el partido por la incorporación de Alinco al PRO, siempre basadas en una moral conservadora y aplicable en la mayoría de los casos a terceros y no a ellos mismos. Que no puede ser que un partido reciba a alguien así, que con qué moral después se pueden presentar frente a la gente, y otras categorizaciones más que quizás ustedes que leen esto también han escuchado. Yo en un principio escuché y hasta hice propias algunas de ellas, sin embargo reflexioné......y llegué a la siguiente conclusión; el PRO es un partido INCLUSIVO (concepto que es uno de los principios del partido) y que no impone morales a nadie. También es un partido que no cree en la discriminación en ninguna de sus expresiones, es un partido libre y democrático, participativo y abierto, además de ser provocador. Considero que con la incorporación del diputado René Alinco, el PRO logró validar todos estos conceptos, ya que cuándo debió tomar una decisión al respecto, respeto todas sus convicciones más profundas y las aplicó manifestando la validez de éstas. Por lo que me he dado cuenta la elección que hice de participar de manera activa en éste proyecto fue la acertada.
Yo a través de estas lineas le doy la bienvenida diputado Alinco.
Salud por eso !!!
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